Encontraremos numerosos vestigios en torno a los caseríos situados a lo largo del parque natural.
Megalitos, túmulos y dólmenes muy antiguos por un lado,
y neveras y caleras preindustriales por otro.
La Estación Megalítica de Pagoeta se encuentra en el monte del mismo nombre, en el término municipal de Aia. Comprende un dolmen y ocho túmulos: los túmulos de Arreta, Murugil I, Murugil II, Urruztume I, Urruztume II, Urruztume III, Urruztume IV y Peñas de Saberri y el dolmen de Olarteta.
Los dólmenes, son tumbas colectivas construidas en la Edad del Cobre y el Bronce, hace entre 5.000 y 3.000 años.
Los caleros son los grandes hornos de piedra que antiguamente se utilizaban para obtener cal calentando la piedra. Redondos, tenían entre 4 y 8 m de diámetro y podían alcanzar los 10 m de altura. La piedra se convertía en polvo de cal, necesario antiguamente en el mundo rural tanto para la casa como para el trabajo doméstico: en la construcción, como abono en los campos, como desinfectante…
Aquí en Euskal Herria entre los siglos XVIII – XX prevaleció el uso de la cal y hoy en día podemos encontrar numerosos vestigios alrededor de los caseríos.
La nevera de Sagastizabal y los neveras del caserío Nebera
Son agujeros para la acumulación y conservación de nieve. Eran o construidos por el hombre o gracias al relieve del monte, naturales. Durante las nevadas del invierno se llenaban, hacían hielo y lo vendían. El hielo se utilizaba en el día a día para la conservación de la comida y la elaboración de helados o bebidas refrescantes. Hay dos neveras cerca del caserío Nebera, la más grande fue construida en 1660 por orden de la Señora de Zarautz.